¿Por qué las cosas no las hacemos tan bien como deseamos?
a) No estamos preparados.
b) No nos dejan.
c) Faltan recursos
d) No queremos.
Muchos votarían por la c), pero cada día creemos que las opciones b) y d) son las mayoritarias. Es el problema de anteponer intereses, deseos, influencias, presiones, miedos, etc. Si todo eso se coloca delante, avanzar es imposible.
Otra reflexión de la semana, validada tras años de experiencia. ¿A quien se le hace más caso en una organización?
a) Al grupo que trabaja bien y cuando se queja lo hace de forma constructiva.
b) Al grupo que trabaja bien y cuando se queja lo hace de forma destructiva y amenazando.
c) Al grupo que trabaja mal y se queja constructivamente.
d) Al grupo que trabaja mal y se queja con amenazas.
Desgraciadamente, muchas más veces de lo esperado al b) y al d). El motivo fundamental no es otro que el clásico miedo. Y así sigue todo, y nadie se mueve un ápice, y las amenazas y el egoísmo ganan la partida. No os dejéis ganar, por favor…
Qué razón tienes en todo lo que dices…Oídos sordos a las amenazas y el egoismo, aunque yo creo que la envidia (profesional o no) también tiene su papel.
Bueno, en la primera pregunta, b) y c) muchas veces van de la mano.
Gracias por contarlo así de claro.
Es triste pero la realidad es así, ganan los que amenazan. Ayer estuve a punto de pasar del grupo a) al b), pero me acordé del post y del "no os dejéis ganar…" Conclusión: me ganaron, pero me esforcé y fui valiente, no fue porque me dejara…
Aparte del miedo, otro destructor de entusiasmo son las personas que siembran cizaña. En mi servicio hay una cuya frase favorita es "ayer hablé mal de tí cuando no estabas y tus compañeros no te defendieron" (¿se puede ser más retorcido? ¿debemos tolerarlo?)
A veces es tan difícil luchar "contra los elementos" que uno flaquea y se desvanece…pero ya sabes, como Sísifo, no desistimos, volvemos a la carga una y otra vez, una y otra vez…