A los exploradores se les reconoce por los puñales en la espalda… Esa gente que innova y avanza, que intenta luchar por una idea, y de repente se encuentra con que los nubarrones se concentran sobre él. Tanto la resistencia al cambio como el miedo a la pérdida de poder hacen que las zancadillas estén a la orden del día.
Pero en el sector sanitario, además de los puñales por la espalda, hay un problema añadido: el fuego amigo. Personas que se ponen de tu lado, que apoyan tus ideas, pero que a la mínima… ¡zas! Un gran ejemplo son los círculos endogámicos, muchas veces alrededor de sociedades, colectivos o iniciativas de rancio abolengo, que en ocasiones abren los brazos a nuevas ideas de gente “anónima”. Abren los brazos delante de todos y después los cierran y aprietan hasta que se acaba el oxígeno y llegue la nada.
Antes la inercia dirigía el mundo sanitario… Tal vez el cambio se haya instalado a nuestro alrededor, y de la inercia pasemos al gremialismo descafeinado para luchar por la supervivencia. Habrá que buscar un nombre para describirlo.
Menos mal que en las redes, en los centros sanitarios, en las universidades, y en muchos más sitios, hay gente con ideas, con ganas y con la sensación de que los que deciden, no se enteran, y que los que aconsejan, sólo piensan en si mismos.
Elvis Costello! Grandes recuerdos de la Conjura y su sorteo de EPs en tiempos de selectividad
Entonces no eran amigos.
Hay que andarse con pies de plomo, y más en las redes, dónde todo quiere estar manipulado por unos cuántos, siempre los mismos.
¡Qué triste!
Pero que cierto
Entonces no eran amigos…
Un placer leerte,,como siempre 😉
¡Qué triste!
Amigo es el que te escucha, y no te extorsiona, te excucha sin pedir nada a cambio.Y a la inversa
Y no hablemos ya, de los circulos endogámicos, y de ciertos colectivos cerrados, que ven una amenaza a las nuevas ideas, y si no les bailas el agua, también te da la patada…en fin…penoso…
¿Cómo puede funcionar bien una sociedad, si a pequeña escala (los jefecillos, y los menos jefecillos), ponen una cara, cuándo es otra, algunos van de divos ,actúan con prepotencia, y son tan listos, que hacen que no se note.
¿Cómo puede funcionar así cualquier cosa?
Eres un romántico, un nostálgico 😉
¿No eran flechas en la espalda? Como dice Julio eres un romántico y yo añado energético y sin pelos en la lengua. Me has hecho sonreir con tu post en un déjà vu entretenido :)))
Querido amigo, el postureo, ahora más que nunca, está de moda… Un abrazo.
Ay!!! Cuanto necesita el sistema que se acaben las flechas y los falsos amigos…
Un abrazo campeón.
Ah!! Yo también creo que eres un romántico ;))