El problema de tantos comités, intermediarios, consultores, grupos representativos y portavoces, es que las necesidades acaban transformándose hasta que cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. Incluso cuando escuchamos al paciente, a veces entendemos lo que nos interesa.
Tom Fishburne acierta de pleno con esta viñeta:
– Consumidor: ¿Puedes subir la calefacción? Hace frío aquí.
– Moderador: el consumidor tiene frío.
– Analista de mercados: el consumidor está buscando calor.
– Experto en marketing: nuestra marca ofrece calor al consumidor en un mundo frío.
– Cartel publicitario sobre unos paquetes de comida para gatos: Te calienta de dentro hacia fuera. Consumidor: ¿mmmm? Al menos hay un cupón de descuento.
Supongo que hay comentarios obvios.
De verdad sabemos lo que piensan los consumidores-clientes-usuarios-pacientes?
Les interpretamos bien o en funcion de lo que queremos vender-dar-proporcionar-asistir?
De verdad pensamos que les importan las cosas que a nosotros nos importan tipo de contrato – calidad – …?
Como cualquier empresa que quiera triunfar – ganar dinero – proporcionar el mejor servicio lo que hay que hacer es a lo que nos dedicamos y de la mejor manera posible.
Buen dia – mes – año – vida..
Los intermediarios, aunque a veces necesarios, deben ser eliminados (en el mejor sentido de la palabra) con cierta perioricidad… hay que palpar directamente qué piensa quien nos interese, ya sea el cliente final, los empleados, los proveedores… ningún informe puede sustituir la experiencia del contacto directo con las personas y sus impresiones. Se reciben sensaciones fundamentales para la buena interpretación y la puesta en cuestión, de la información de los informes elaborados por los asesores, consultores, mandos intermedios, etc. son indicadores complementarios, ni uno ni otro son válidos por sí mismos…
Los de marketing,cada vez más perdidos. 🙂
Se aferran a técnicas de mercado caducas y algunos siguen despreciando las nuevas redes sociales que les ofrecen cercanía o inlcuso comunicicación directa con el consumidor /cliente.
Si hubiera una relación más estrecha pienso que habría menos malentenidos.
Buenos días,
Yo creo que hay una característica que diferencia a los centros sanitarios de cualquier otra empresa: el objetivo no es "vender" algo al usuario-paciente, sino cuidar su salud . Y coincide con el objetivo del paciente, que no es "comprar" algo que necesita, sino cuidar su salud.
Haciendo un paralelismo con el Dr. Salvador Casado (con permiso), no solo los médicos, sino cualquier entidad o producto relacionado con la salud de alguien debe acompañarle, asistirle, procurarle lo que necesite en su objetivo. Unas veces será curando, otras previniendo, rehabilitando…
Saludos
Tan real como la vida misma…
Igual en la sanidad publica no!, pero en la sanidad privada, si hay mucho en juego, y los dptos de marketing se esfuerzan en liarla!!, y digo liarla, porque el cliente cada vez conoce menos el producto-poliza que contrata.
Pero que esperas cuando contratas o compras una poliza con el mismo nombre que un carburante!!.
Nombres como Activa, Joven, Completa, Oro, Multi, Familiar, Plena, etc… todos estos son nombres que usan las compañías privadas para denominar a sus productos estrella: Las POLIZAS DE SALUD.
Aquí es importante la labor del comercial o tb llamado asesor de la compañía, y de este tema puedo dedicar una entrada densa y completa!!
Como dice el Sr. Carrascal: ..y es que este País, es una lastima!!
Buena entrada miguel, pero me invita mas a comentar la cantidad de de topicos q hay en los comentarios (o eso creo yo)
Lo de quitar intermediarios, creo q es algo utopico/impoosible: todos intermediamos. No conozco a nadie autosuficiente en el sentido mas estricto. Q no necesite de nadie ni tenga a nadie que necesite de el.
El marketing, aunq es cierto q no aciertan muchas veces, basta preguntarnos q seria de Coca-cola, Ford, facebook, Google, etc, sin el marketing.
Hay mas pero no domino tanto el tema sanitario gratuito universal.
un saludo y buen finde. 🙂
Buenas de nuevo ;-). Claudio, debo haberme explicado mal… en "deben ser eliminados (en el mejor sentido de la palabra) con cierta perioricidad… ", el matiz introducido con "cierta perioricidad" esboza lo que más adelante en el comentario se proclama como "complementariedad", ningún alto directivo debe dejar de tener contacto con el mercado al que se dirige… si no corre riesgo de olvidar quien es su "cliente" y empezar a pensar en el sexo de los ángeles… cada cuánto tiempo tiene que ver la realidad con sus propios ojos, es decir, qué frecuencia debe tener ese contacto directo sin intermediarios, pues… ahí ya depende de cada caso… espero que ahora mi mensaje se pueda entender un poco mejor. Si aún así, es el típico tópico… bueno, pues qué se le va a hacer… me habrá afectado el verano ajjajajaja.
Un saludo a todos y gracias por el debate, nos hará mejores o al menos a mí seguro 😉
manuel!! si no es nada malo lo del topico.. solo quise matizarlo (y es verdad q no habia caido en la cuenta de "cierta periodicidad").
Fue solo comentario sobre lo q habia leido. 🙂
buen finde otra vez.
No pasa nada hombre… si como tú habrá mucha más gente… no se.. es que a mi lo de los tópicos típicos… me fastidia bastante, de hecho intento comentar sólo si voy a intentar dar algo diferente o complementario… para que me hagan perder el tiempo con lo ya muy sabido/leído/oído… prefiero callar. Lo dicho, gracias por hacerme mejor, me encanta debatir!
Qué bueno! Me ha recordado el famoso juego del teléfono. Y por este motivo en Internet triunfan iniciativas con pocos recursos pero que están hechas por la misma gente para personas afines.
Creo que una de las causas que provocan este tipo de situaciones es que hay muchas empresas de servicios a las que les interesa que el cliente no se entere de nada. Precisamente en esto basan su modelo de negocio, en crear estudios, ideas, proyectos sinsentido pero que a nadie le importa porque viven en la ignorancia. Creo que más que cargar contra los intermediarios, todos los participantes del proyecto deberían tener un espíritu más colaborador y sobre todo empatía para entender una parte de lo que hace "el otro".