Como ya sabéis, ni este es un blog sobre problemas de salud, ni somos profesionales sanitarios ni nada parecido. Pero en las últimas semanas hemos leído varios artículos y reseñas sobre el posible efecto de la serie de Netflix “Por 13 razones” en el número de suicidios, y hemos decidido compartir algunas ideas y enlaces al respecto.
Lo primero es recordar el llamado efecto Werther, derivado de la famosa novela de Goethe (1774), y cuyo origen fue el elevado número de suicidios que ocurrieron imitando al protagonista. Existe evidencia sobre el papel de este efecto con las series de televisión, aunque también existe el llamado efecto Papageno por el cual los contenidos audioviduales que presentan alternativas ante situaciones críticas pueden ayudar a prevenir suicidios (esta vez el origen es Mozart y su obra La flauta mágica).
Para conocer parcialmente el efecto de la serie, varios investigadores han analizado las búsquedas en Google sobre suicidio (en general) y sobre términos asociados a la ideación suicida y han encontrado que el estreno de la serie elevó ambos (las búsquedas genéricas y las específicas). Tal y como señala el estudio no se ha probado que estas búsquedas concretas hayan generado más intentos, pero si hay evidencia previa respecto de la relación entre las búsquedas y el número de suicidios así como de la influencia (positiva y negativa) de los medios en el número de intentos.
Por cierto, es muy llamativo que las búsquedas específicas que más se incrementaron fueron las de “suicide songs” y la de “teen suicide“, como se puede observar en la gráfica C.
Los efectos de imitación de la serie se pueden observar en las redes sociales (al menos en temas de estilo o memes) y en este artículo del New York Times. Un ejemplo es la frase “bienvenido a tu cinta“.
La misma revista (JAMA Internal Medicine) que publicó el análisis de las búsquedas en Google, preparó un editorial titulado “A Call for Social Responsibility and Suicide Risk Screening, Prevention, and Early Intervention Following the Release of the Netflix Series 13 Reasons Why“. Entre las peticiones de los autores, aparece el compromiso de los productores y creadores de esta serie de adherirse a las guías sobre prevención del suicidio en cuanto a los mensajes que deben aparecer en pantalla, así como la apoyar a los adolescentes a la hora de procesar las imágenes explícitas que aparezcan. Además, el texto pide una mejora en las estrategias de prevención y de detección de conductas en jóvenes.
Algunas sociedades científicas, concretamente en Alemania, han publicado una declaración alertando de los efectos negativos de la serie en jóvenes y adolescentes y el posible incremento de intentos suicidas imitando los comportamientos de la protagonista de la serie. En esa línea, la International Association for Suicide Prevention ha publicado un escrito sobre las infracciones de la serie respecto de los códigos de conducta para medios audiovisuales en relación a la prevención del suicidio, algo parecido a lo que han dicho organismos y sociedades similares. Incluso en Nueva Zelanda, la serie ha sido calificada como RP18, es decir, los menores de 18 años deben verla acompañados de un adulto, y de hecho se han publicado consejos para padres y educadores para ver y comentar con adolescentes y jóvenes los capítulos de la serie.
Un reciente editorial de la revista BMJ reflexiona sobre la necesidad de minimizar el riesgo para personas vulnerables y pide que al menos los productores de la serie hagan caso a los expertos en educación y también en prevención del suicidio. Un tema delicado y complejo, pero que conviene comentar. Ah, y lo dicho: no somos expertos en el tema, que quede claro.