En octubre de 2011 publicamos una entrada titulada “El caso del nuevo miembro del equipo” en el que se planteaba un caso real acerca de la contratación de un pediatra para un servicio hospitalario de pediatría. La duda surgía porque existían dos candidatos: el residente del propio servicio o un residente de otro hospital. El conflicto subyacente se basaba en la posible endogamia de los grupos estables a largo plazo, entendida como “actitud social de rechazo a la incorporación de miembros ajenos al propio grupo o institución“. Muchos opinaron en aquella entrada que era mejor permitir el acceso a un especialista formado en otro hospital, pero surgieron múltiples dudas.
“Combatir la endogamia, la falta de movilidad profesional, las nuevas barreras entre comunidades autónomas, y los «800» mercados médicos de España, «prohibiendo que un MIR se quede en su hospital, no contratando a nadie en su pueblo y premiando a la gente que se mueve»“.
La endogamia tiene fácil remedio prohibiendo durante unos años la contratación de los MIR formados en el hospital (o de los doctorados de una universidad), lo cual facilitaría una mejor asignación del talento, así como un mayor mestizaje cultural, como el que históricamente hemos conocido: España ha sido un país de migraciones internas y externas y
solo en los últimos 30 años, como consecuencia del neoproteccionismo autonómico, la rigidez del mercado de la vivienda y la consolidación del estado del bienestar, los profesionales han perdido movilidad: nacen, crecen,se reproducen y mueren en el mismo lugar.
Seguro que algún hospital tanqueaba para quedar de los últimos y elegir mejores MIR 😉
Los MIR, o incluso adjuntos, vuelven mucho mejor "hechos" tras estancias en otros hospitales.
No todo lo que vemos/hacemos es lo mejor.
Más que endogamia lo veo como excesivo continuismo, y no sólo de nuevas contrataciones…ya lo hablabas el otro día con lo de la resistencia a los cambios.
la analogía del draft es muy buena…si incluso hay tope salarial ¿no?
Los Lakers sería el H.La Fe
Los Celtics el Clinico de Valencia
Oklahoma el Clínico de Alicante
Cuando te incorporas a un servicio, independientemente de que te hayas formado en el o no, lo haces para cubrir un hueco o por una necesidad para la que probablemente se precisa una formación específica. Habitualmente como interino y con una inestabilidad laboral. Considero muy difícil que puedas realizar innovaciones que no estén apoyadas por el servicio o la dirección.
Suele ser un momento de importante trabajo asistencial como interino. Habitualmente el más frágil de todos.
No creo que colocarte donde no te hayas formado pueda solucionar la ineficiencia del sistema en personal o el inmovilismo. Pudiendo crear otras problemáticas más graves.
Me parece muy complejo este problema y muy interesante el debate.
El sistema está viciado y hay que mejorarlo. Veo bien que gente de unos hospitales, terminen trabajando en otros, puesto que pueden ayudar a mejorar los servicios con nuevas formas de trabajo, siempre y cuando el adjunto de turno quiera mejorar el servicio. Por otro lado, también entiendo a la gente que quiere quedarse cerca de casa.
http://todoenfermeriasalud.blogspot.com.es
A mí, en concreto, me hubieran hecho polvo. Con dos hijos ya escolarizados y mi marido fijo, hubiera tenido que dejar de ejercer mi profesión. Creo que es absurdo lo de PROHIBIR contratar a gente formada en el servicio. Las islas nos quedaríamos sin personal.
No encontraremos la solución perfecta.
Si bien en la NBA empiezan los equipos más modestos a elegir, el objetivo del elegido es llegar a los grandes (PGasol: de los Grizzlies a los Lakers. Pero si la ÑBA fuera mejor que la americana, aun lo tendríamos por aquí).
En Sanidad, la persona busca estar cerca de casa o en un centro "con nombre" o donde le dejan. Casi siempre en ese orden.
Totalmente de acuerdo que la llegada de un nuevo miembro es un revulsivo positivo. Delicado por lo que puede revolucionar, pero positivo al final.
Es un debate entre "lo mejor para el sistema" y " lo mejor para la persona". Pocas veces confluyen.
Tengo mis dudas de que lo no bueno para la persona, pueda ser lo bueno para el sistema (trae la inestabilidad en los puestos, traslados, burnout, etc.).
La innovación y cambio debe potenciarse en las personas que trabajan en los servicios y los propios residentes. Hay un potencial enorme desaprovechado. No creo en los Mesías.
Problema 1. Aquí no hay una liga, sino 18. Problema 2. Impedir la conciliación familiar no mejora el sistema. Problema 3. No hay incentivos para salir y "ver mundo". Problema 4. Falta de transparencia en la oferta laboral (vacantes ocultas, etc.) debido a intereses "privados" (caciquismo, vaya).
Un modelo de "incentivación" en la AGE es ofertar mejores plazas (Jefaturas de Servicio o complementos superiores) en los sitios menos apetecibles (periferia) y plazas peores (puestos base y complementos bajos) en los lugares con más competencia (ciudades grandes). Lo de tener todo a la vez es complicado, pero tú decides a qué das más valor.