La pasta o la encuesta


En los últimos años, las encuestas han pasado a realizarse masivamente por internet, y de hecho son pocas la que se realizan en papel. Una muestra de ello es la proliferación de webs especializadas en encuestas o incluso que Google haya incluido una herramienta para la construcción de encuestas.

Sin embargo, la facilidad en el uso y difusión de las herramientas no implica un aumento claro de las respuestas a la encuesta. En un reciente estudio (“Effects of Incentives and Prenotification on Response Rates and Costs in a National Web Survey of Physicians“) se estudia el cambio en el comportamiento de respuesta a una encuesta a través de web tras el uso de incentivos económicos.

En el estudio hubo varios grupos relacionados con la notificación previa por carta (no notificar, notificación, notificación con preincentivo de 2 dolares) y el incentivo posterior a la respuesta (ninguno, sorteo de 200 dolares, 50 dolares, 100 dolares). Los resultados son claros:

– La participación se incrementó en los grupos con incentivo posterior de 50 y 100 dolares.
– La notificación previa postal incrementó las respuestas, pero el preincentivo de 2 dolares no tuvo ningún tipo de influencia.

Así que si quieres más respuestas, promete dinero. Y si das la pasta antes, ni encuesta ni nada.

2 comentarios en “La pasta o la encuesta”

  1. Resultados "científicos" reales como la vida misma. Dar la pasta antes de hacer el trabajo no acostumbra a arrojar buenos resultados, ni en encuestas ni en nada.
    Los premios "aspiracionales", aquello de participa en el sorteo y los premios directos, si haces tal cosa te damos tal otra, sí que funcionan.
    Puedo asegurarte que hace pocos años sortear 5ipods a cambio de una encuesta sobre una web hizo que 950 profesionales de la salud participasen en ella.
    Los humanos somos así: si trabajo me dan zanahoria, pues venga !!!

  2. Gracias por la entrada Miguel; como sabrás una de mis principales frustraciones es esa… mientras otros convocais una encuesta y os respondemos 200 yo no paso de 20.

    Respecto a lo que dice el artículo cabría la réplica de "los puristas" diciendo que el incentivo se puede entender como una intervención que no sólo favorece la obtención de un mayor porcentaje de respuesta sino que puede "inclinar" esta en un determinado sentido pues cubrir una encuesta esperando un premio al final puede cambiar la disposición de quien lo hace. Supongo que esta clase de sesgo también estará estudiado.

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